El deporte tiene grandes beneficios para nuestra comunidad y nuestra sociedad en general. El deporte para muchas personas da sentido a la vida y un propósito a quienes participan y es un orgullo para quienes organizan los eventos deportivos y un placer para los espectadores. Tampoco podemos olvidar los beneficios para nuestra salud y bienestar y cómo une a nuestra comunidad de manera positiva.
En este blog vamos a hablar sobre lo que entendemos por éxito dentro deportivo y cómo debemos recompensarlo y alentar a las personas a superar su miedo a las competiciones y a dejar atrás la televisión y los videojuegos en pos del deporte.
¿Cómo es el éxito deportivo para ti?
Para mucha gente, sus deportistas favoritos los inspiran a través de la dedicación y los éxitos deportivos que consiguen, ya sea por el éxito financiero o simplemente por los reconocimientos y el respeto que genera el ser un atleta de élite.
Todos nos maravillamos de las habilidades y el increíble rendimiento que se exhiben en eventos como el Tour de Francia, los Juegos Olímpicos, los distintos campeonatos mundiales deportivos o, por supuesto, el Gran Slam de Wimbledon.
Sin embargo, el simple hecho de que no estemos destinados a la grandeza deportiva ni a una carrera como «profesional» no significa que no podamos beneficiarnos de la participación en el deporte a nivel aficionado o de base.
“¿Sabes cuál es mi parte favorita del juego? La oportunidad de jugar».
Mike Singletary
Si como quien escribe estas líneas, ¡sabrás qué terminar un evento o una competición deportiva, incluso el último, puede convertirse en una gran victoria a nivel personal! Un servidor, como entusiasta ciclista aficionado que corre en competiciones donde se inscriben participantes más jóvenes (y competitivos), todavía recuerda lo orgulloso que se sintió el día que consiguió llegar a meta con el pelotón sin caerse. Recuerdo entrar por la línea de meta sonriendo de oreja a oreja como si fuera el ganador.
No hay nada de malo en querer ser el número uno, por supuesto. Esforzarse por ser lo mejor que podemos ser es increíblemente motivador y crea el impulso, la determinación y el esfuerzo que necesitamos para superarnos en los buenos y los malos momentos. También impulsa nuestro crecimiento y desarrollo como deportistas y como personas.
Sin embargo, el éxito no solo debe medirse en términos de subir al podio. Desde nuestra perspectiva, todos los que participan, acuden o hacen posible el evento merecen una medalla (¡obviamente recomendaríamos una medalla personalizada!). Ya que colectivamente creamos placer, alegría y satisfacción personal para la mayoría. Construimos relaciones, amistades, comunidades y promovemos la paz y la camaradería. ¡Y eso se merece una medalla!
Por eso, si estás organizando cualquier tipo de evento deportivo, debes asegurarte de entregar medallas a los finishers que recompensen su participación y su esfuerzo. También puedes recompensar, además de a los ganadores, a todos aquellos que han venido a apoyar el esfuerzo de los participantes, como los entrenadores o los espectadores.
¡Hora de levantarse del sofá!
¿Cuáles son los sentimientos que mayor impulso ofrecen al comportamiento humano? Sí, lo has adivinado: son el miedo y deseo. Sabemos que algunas personas son muy competitivas y tienen un tremendo deseo de ganar y, como resultado, no luchan por levantarse del sofá debido a la frustración. ¡Estoy seguro de que conoces a alguien así!
Igualmente, hay muchos que temen la competición. Les preocupa no estar a la altura de los demás hacer el ridículo o de no sentirse verdaderos deportistas. Sin embargo, estamos hablando de nuestro miedo, no de nuestra realidad, porque ser ‘deportista’ se reduce a un estado mental. Y está demostrado que todos aquellos que se esfuerzan suelen recibir más palmaditas en la espalda y respeto que desprecio y ridículo por parte de quienes los rodean.
Dicho esto, sabemos que psicológicamente no es fácil superar nuestros miedos y prejuicios o una clara falta de confianza en nosotros mismos. La vida del siglo XXI nos ofrece muchas razones para acurrucarse en el sofá con un aperitivo rápido y una copa de vino y evitar cosas que nos hacen sentir incómodos o nos producen cansancio.
Es por eso que debemos aplaudir y recompensar a aquellos que lo intentan a cualquier nivel y a cualquier edad. ¡Estoy seguro de que cada vez hay más padres en todo el país que luchan por mantener a sus hijos activos y lejos de la videoconsola! Muchos están ya actualmente preocupados por el futuro de sus hijos si continúan aislándose y no quieren salir al aire libre y participar en deportes.
Entonces, ¿qué podemos hacer para alentar a otros a levantarse del sofá y participar?
Solo tienes que animar a las personas a intentarlo. Organiza sesiones de prueba y eventos no competitivos para permitir a los de tu alrededor que prueben el deporte. El estrés de la competición y la lucha puede desanimar a muchas personas que practican un deporte por primera vez. ¡Prueba con una travesía divertida antes de empezar con los Iron Man!
Proporciona equipo (aunque sea de alquiler) para que la gente pueda probar antes de comprometer sus ahorros en un equipo deportivo que quizás dejen pronto de realizar. Esto también ayudará a aquellos que tengan menor capacidad financiera y asegurará que los clubes deportivos sean inclusivos y no discriminatorios.
Cuando sea factible, crea categorías dentro de las competiciones. Esto permitirá que las personas con discapacidad, los niños y los mayores participen juntos. Claro que puede haber un campeón de la general. Pero será más justo si también contamos con ganadores para cada categoría.
Debemos alentar a aquellos que coordinan, administran y son responsables del deporte en nuestras comunidades u ofrecen acceso a una amplia gama de actividades. No todos quieren correr, jugar al fútbol o sudar y hay muchas actividades inusuales que son muy divertidas y relativamente económicas si usamos nuestra imaginación. Sí, la financiación es escasa, pero se ofrece actividades que tienen un atractivo más amplio, aumentamos las posibilidades de involucrar a más personas.
Como hemos dicho anteriormente, recompensar solo al ganador. Las medallas por participación, esfuerzo y compromiso y por apoyar a otros son igual de importantes para motivarnos a levantarnos del sofá. Además, estas medallas distintivas durarán toda la vida y serán un recordatorio positivo constante del «éxito» deportivo en cualquier nivel, en lugar de otros objetos de baja calidad que al final se terminan perdiendo.
¿Cuál es tu opinión?
¿Disfrutas de una actividad deportiva interesante o inusual y animarías a otros a probarla? ¿Tienes alguna idea de cómo podemos alentar a las personas a ser más activas y disfrutar de todos los beneficios de participar? Nos encantaría escuchar tus comentarios.
